Para empezar, porque refleja que su propietario tiene un compromiso por la movilidad sostenible y, por lo tanto, por el cuidado del planeta. Un compromiso que quiere compartir con sus clientes, empleados y proveedores.
Por otra parte, cada vez son más los coches eléctricos que circulan en nuestras carreteras. En 2021 se dispararon las ventas de estos vehículos, y se espera que en 2030 más del 15 % sean eléctricos. Sus conductores necesitarán un aparcamiento que se ajuste a sus necesidades de recarga. Por eso, les gustará saber que pueden hacerlo mientras hacen recados o están en el trabajo.