Mantener una instalación fotovoltaica es muy sencillo y, además, los paneles solares pueden funcionar en condiciones óptimas más de 30 años. Entonces, ¿por qué se producen averías en las placas solares? El motivo principal suele ser la calidad de los materiales de la instalación, pero si estos son excelentes y los profesionales hacen las cosas bien, tus paneles no te darán preocupaciones y aprovecharán la energía del sol a pleno rendimiento.
Aun así, es importante que conozcas cuáles son las averías más comunes para saber cómo prevenirlas y evitar malas noticias.
Las 10 averías más comunes en placas solares
La corrosión
Con el paso del tiempo, y si los paneles son de baja calidad, pueden sufrir corrosión interna, especialmente por los cambios de temperatura o la humedad, ya que esta favorece la oxidación. Las manchas oscuras en el interior de la placa son una señal de que algo no va bien.
Humedades
Aparecen con las penetraciones del agua en la placa solar, principalmente por haber utilizado materiales de poca calidad o por un mal ensamblaje de los paneles.
Deformaciones
Lo normal es que aparezcan en el centro del panel y, aunque primero se doblan, acaban por hundirse. Por eso es fundamental que los materiales sean resistentes.
Pequeñas fracturas o grietas
Suelen aparecer en la superficie. Quizá al principio no se ven a simple vista, pero con el paso del tiempo, se hacen más grandes y reducen la efectividad de las células solares.
A través de técnicas termográficas se ha demostrado que las microfracturas producen un aumento en la temperatura de la célula y, si no se repara a tiempo, pueden darse roturas en el cristal o puntos calientes, otra de las averías más comunes.
Los puntos calientes o ‘hotspots’
Si las células solares son de mala calidad, es más fácil que en algunas zonas se acumulen temperaturas elevadas que reducen la eficiencia de la instalación.
Los motivos principales de los puntos calientes son:
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Mantenimiento inadecuado de la instalación: el polvo, la arena en suspensión y otras impurezas afectan a la vida útil del panel. Por eso son necesarias las limpiezas periódicas.
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El estado del tejado: las sombras pueden crear puntos calientes a largo plazo. Es más, si el tejado tiene mucha inclinación, el propio anclaje de las placas solares puede provocar sombreados. Por eso es importante un buen diseño de la instalación fotovoltaica.
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Soldaduras defectuosas entre paneles: es uno de los fallos más comunes si no se hace un montaje correcto.
Rotura de las conexiones
El motivo principal es el paso de corriente que produce calor en las cintas que conectan las células. Si, además, estas cintas están sometidas a cambios de temperatura ambientales (entre noche y día o frío y calor), las conexiones pueden llegar a romperse o a generar un punto caliente en la placa.
Cables suelto
Esta avería es el motivo por el que durante la limpieza de la instalación se recomienda revisar si los cables se conectan bien. Eso sí, no te la juegues y antes de manipularlos por tu cuenta, llama a un especialista.
Diferencias de voltaje
Otro de los motivos que puede disminuir el rendimiento de la instalación es la diferencia del voltaje entre los paneles y la toma a tierra. De hecho, puede perder hasta el 10% de eficiencia.
Efecto PID (potencial induced degradation)
Es una degradación del panel como consecuencia de las corrientes de fuga entre las células y el resto de componentes. Esta fuga provoca un estrés en las células del panel que también afecta a su rendimiento.
La calidad de los paneles es esencial para evitar el efecto PID, pero si este se da, los profesionales técnicos se encargarán de solucionarla.
Fallo en el EVA de los paneles solares
El EVA es un material compuesto de etileno acetato. Una de sus cualidades es la excelente transmisión de la radiación, así como una baja degradabilidad por el efecto de los rayos solares. Por estas razones se utiliza como “un encapsulante” en los paneles, ya que recibe la radiación y crea una especie de película aislante para evitar la entrada y salida de humedad y aire.
Ahora bien, este material, si es de baja calidad, puede dar problemas y reducir la producción de energía de la instalación. Si no se soluciona a tiempo, el panel acabará siendo inservible.
¿Cómo se pueden prevenir las averías en las placas solares?
¿Eso significa que nunca fallarán? Depende. Al final, es un producto fabricado y su rendimiento está directamente relacionado con sus materiales y con los procesos de fabricación.
Elegir bien la compañía que va a proyectar y a montar tu instalación fotovoltaica es lo más importante a la hora de prevenir averías en las placas solares. Lo mejor es hacer las cosas bien desde el inicio. Por eso:
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Si vas a montar tú mismo los kits solares, es importante saber que no es tan fácil como parece. Aunque vienen con instrucciones, se te pueden escapar pequeños detalles que a la larga pueden tener grandes consecuencias.
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Recuerda que con los paneles de segunda mano, por mucho que parezcan más económicos, no podrás reclamar el reembolso ni la sustitución de las piezas averiadas porque no tienen garantía.
La garantía que te protege en las averías de tus placas solares
Los paneles solares deben tener una garantía de fabricación de 10 años como mínimo. En Naturgy personalizamos la instalación y hacemos un diseño óptimo según tus necesidades. Por eso la garantía depende del tipo de instalación. Aun así, podemos avanzarte que:
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Si eliges la opción Tranquilidad: tendrás una garantía de 30 años en los paneles solares y un seguro a todo riesgo que cubre la instalación completa durante 5 años. Pasados los 30 años, la garantía de producción de las placas es del 82 %.
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Si te quedas con la opción Óptima: los paneles solares tienen una garantía de 12 años. Después de 25 años, la garantía de producción de las placas es del 85 %.
En ambos casos, la garantía de los inversores es de 10 años y el montaje de la instalación tiene una garantía de 2 años.
Las placas fotovoltaicas de tu casa siempre a punto
Contamos con una gran experiencia en soluciones energéticas y ahora, tú puedes ser el siguiente en tener una instalación totalmente personalizada y con todas las garantías.
La iluminación
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Para lámparas de uso de uso frecuente, opta por LEDS. Es cierto que son un poco más caros, pero son de larga duración (si haces un buen uso, no tendrás que cambiarlos en 15 años) y ahorran entre el 80 % y el 90 % respecto a las lámparas incandescentes.
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Siempre que puedas, deja que la luz natural entre en casa.
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Inspírate en los principios de la iluminación circadiana para regular la intensidad o el brillo de las lámparas en cada estancia. Además, tiene muchos beneficios para la salud, como la disminución de la fatiga visual o la mejora del estado de ánimo o del sueño.
Calefacción y aire acondicionado
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20 ºC en invierno y 25 ºC en verano es más que suficiente para conseguir una temperatura agradable en casa. Un grado más o uno menos hace que el consumo de energía aumente un 8 %.
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Para conseguir una temperatura de confort también puedes adaptar la ropa al clima. Si en invierno te pones un pijama más grueso, tendrás una mayor sensación de confort y no subirás tanto la calefacción.
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En verano, si tienes toldo, puedes bajarlo para que el sol no caliente tanto la casa. Bajarás un poco el aire acondicionado y ahorrarás energía. No es complicado: se trata de usar el sentido común.
La comida y la compra
¿Sabías que los alimentos también tienen huella de carbono? La forma en que se produce la comida o los kilómetros que esta recorre hasta llegar a tu cocina son factores determinantes que influyen en la huella de carbono. Para reducirla, puedes seguir estos consejos:
Llámanos al teléfono gratuito 900 799 960 y te asesoraremos sobre la mejor oferta para ti. O, si lo prefieres, utiliza nuestro simulador desde casa para saber cómo sería tu instalación solar. En Naturgy te estamos esperando para encargarnos de todo y compartir #BuenasEnergías.