¿Te has preguntado alguna vez por qué saltan los plomos? ¿De qué depende la cantidad de aparatos eléctricos que puedes conectar en casa a la vez? La respuesta está en la potencia que tienes contratada. Por eso siempre te recomendamos elegir la más óptima para tu hogar. Si este dato es importante, el coeficiente de simultaneidad también lo es. Quizá te suene menos, pero en este artículo vas a descubrir qué es y cómo calcularlo.
A la hora de contratar la potencia tienes que asegurarte de que sea suficiente para el uso simultáneo de los equipos de tu hogar. Pero tú no te preocupes, porque los profesionales siempre están dispuestos a ayudarte. Además, también hacen este cálculo los recomendadores de potencia como el que encontrarás en el área de clientes de Naturgy.
La potencia es una especie de “ancho de banda” de la instalación eléctrica y se expresa en kW (kilovatios) en la factura de la luz. Normalmente, estos son los kW que necesita una vivienda en función del tamaño:
| Tamaño de la vivienda | Potencia aproximada |
| 50-80 m2 | 3,45 - 4,6 kW |
| 90-110 m2 | 4,6 - 5,75 kW |
| 100-130 m2 | 5,75 - 6,9 kW |
Si la potencia es demasiado baja para tu consumo y conectas todos los electrodomésticos a la vez, te saltarán los plomos porque habrás llegado al tope máximo.
Por tanto, cuanta más potencia tengas, más electrodomésticos podrás poner en marcha simultáneamente, aunque el gasto también será más alto. Como se trata de un gasto que es fijo y que se repite mes tras mes, es muy importante encontrar la potencia óptima para ahorrar y ser más eficiente
Necesitas saber qué es el factor de simultaneidad. Se trata de dos términos distintos aunque, como verás, están relacionados.
El factor de simultaneidad es el dato que te indica la potencia eléctrica necesaria para tu hogar en caso de conectar todos los aparatos a la vez.
Con estos datos deberás aplicar la siguiente fórmula para calcular el factor de simultaneidad:
Factor de simultaneidad = potencia máxima/la suma de potencias de los aparatos
Ahora ya sabes qué es y cómo calcular el factor de simultaneidad, pero en realidad, casi nunca vas a necesitar poner en marcha todos los equipos a la vez. A lo mejor, por las mañanas pones la lavadora y la televisión mientras el frigorífico está en marcha, pero es difícil que todos los equipos estén en funcionamiento a la vez. Se ve claro si pensamos en la calefacción y el aire acondicionado, que nunca se ponen a la vez.
Por eso, lo que se hace es redondear el factor de simultaneidad con el coeficiente de simultaneidad en función del uso cotidiano que haces de los aparatos.
Por lo tanto, es una manera más real de saber si la potencia que has contratado es la correcta.
Recuerda que no hace falta incluirlos todos. Por ejemplo:
Encontrarás este dato en las instrucciones de cada equipo, pero te dejamos una tabla con los valores aproximados:
| Lavadora: 1.500 - 2.500 W |
| Lavavajillas: 1.500 - 2.500 W |
| Frigorífico: 250 - 350 W |
| Microondas: 100 - 1.500 W |
| Vitrocerámica: 1.000 - 2.000 W |
| Horno: 1.000 - 2.500 W |
| Aspiradora: 1.000 - 1.500 W |
| Televisión: 200 - 400 W |
| Calefacción: 1.000 - 3.000 W |
| Aire acondicionado: 1.000 - 2.000 W |
| Iluminación: 10 W/m2 |
Para ello, divide la potencia de tus electrodomésticos (que has obtenido basándote en tus hábitos) entre la potencia máxima de tu instalación.
Coeficiente de simultaneidad: suma de la potencia de los electrodomésticos que incluyes en el estudio / potencia máxima instalación
De esta forma, obtendrás un dato más ajustado a tu día a día. Este es precisamente el objetivo del coeficiente, ya que el factor de simultaneidad no tiene en cuenta que todos los aparatos nunca se conectan a la vez.
Una vez tengas el resultado, si hay mucha diferencia entre el coeficiente de simultaneidad y la potencia contratada, puede ser una señal de que necesitas hacer un cambio de potencia y empezar a ahorrar en tu factura. Esto también es muy sencillo.
Si eres cliente de Naturgy, en tu perfil puedes acceder al Recomendador de Potencia y descubrir cuál es tu potencia óptima para el periodo punta y el periodo valle.
Recuerda que:
El coste del kW de potencia en el periodo punta es más caro que el coste del kW en valle.
En cada tramo, puedes tener diferente potencia contratada.
Si quieres subir o bajar la potencia, puedes hacerlo sobre la potencia valle, sobre la punta o sobre ambas.
Lo más habitual es solicitar un aumento de la potencia. Este trámite, que es rápido y muy sencillo para ti, se solicita directamente a la comercializadora si el Interruptor de Control de Potencia (ICP), o “los plomos”, como decimos popularmente, saltan sin parar. Esto sucede porque estamos conectando varios electrodomésticos a la vez y superamos el término de potencia contratada.
También puedes solicitar el aumento de potencia si vas a cambiar el uso del suministro de electricidad en casa, porque vais a vivir más personas o porque vais a utilizar más aparatos, por ejemplo.
El cambio suele hacerse en un plazo de 5 días, pero si tu contador no es telemedido, la distribuidora puede necesitar hasta 21 días, ya que un técnico deberá acudir a tu domicilio.
Ahora ya tienes las claves sobre la potencia y el coeficiente de simultaneidad, pero ¿has encontrado la tarifa de uz que más te conviene?
Si todavía no eres cliente de Naturgy, nosotros te lo ponemos fácil para que te olvides de la subida de la luz. Entra en nuestra página web, escribe tu teléfono y haz clic sobre la opción “Llamadme” para que podamos asesorarte sobre la mejor oferta y empezar a ahorrar.
Si vienes a Naturgy, empezarás un camino de #BuenasEnergías en el que ahorrarás, cuidarás el planeta y disfrutarás más que nunca de tu hogar.
