Así que este otoño, aunque también será especial, estaremos más acostumbrados a pasar tiempo en casa debido a las nuevas medidas para contrarrestar esta segunda ola de la Covid-19. Por cierto, ¿recuerdas el primer artículo que compartí contigo?
En casa no soy el único que hace home office. Mi pareja también trabaja online y nuestros dos hijos, en edad universitaria, tienen seis horas de videoconferencias cada día. Esto quiere decir que necesitamos cuatro ordenadores (a veces cinco, en función de la tarea) que se traduce en un gasto de calefacción y luz que antes no teníamos.
Los efectos energéticos y económicos se han empezado a notar, a lo que se suma el hecho de que estamos concienciados con el medio ambiente.
Además, en nuestra familia, valoramos el origen verde de la energía que consumimos en casa, ya que nuestro consumo energético tiene mucho que ver con el calentamiento global. Por eso, contratando formas más sostenibles de generar energía, como las renovables, ayudamos a mejorar la calidad del aire y a tener una mejor calidad de vida.
Si tu caso es similar al mío, seguramente te estarás preguntando qué puedes hacer en casa para ahorrar en el consumo de energía. Así que he aprovechado para repasar lo que a mí me funciona y compartirlo contigo. ¡Ojalá te resulte útil!
Adapta una habitación o espacio como oficina
Trabajar desde casa tiene ventajas si se sabe aprovechar. Además, ahorras en transporte, si es que tenías que desplazarte hasta la oficina. A pesar de esto, separar la vida laboral y personal puede suponer todo un reto. La solución es adaptar una habitación o un espacio de casa como una oficina. Es importante que sea un lugar tranquilo, luminoso, donde se pueda estar cómodo y sin distracciones.
Al salir, recuerda apagar las luces.
Al terminar la jornada, desconecta por completo los dispositivos.
¿Sabías que trabajar con luz natural te permite ahorrar hasta un 5% en tu factura?
Sin embargo, en algún momento del día existirá la necesidad de encender alguna luz, sobre todo ahora que hemos hecho el cambio de horario. ¿Nuestra recomendación? Utiliza iluminación de bajo consumo, como bombillas o luces LED. Ah, por cierto, puedes consultar y optimizar tu consumo energético con los simuladores de Naturgy.
La temperatura
Otro factor determinante a la hora de tener un consumo de energía responsable. Además, trabajar con la temperatura idónea, facilitará más la capacidad de trabajo y concentración. Lo recomendable es establecer una temperatura que garantice la sensación de confort y no suponga un gasto energético innecesario. ¿Y de qué estamos hablando? Para el invierno 21ºC, y para las épocas de verano, 26ºC. Con el termostato inteligente de Naturgy es muy fácil conseguirlo. Además podrás controlar la temperatura a través del móvil desde cualquier lugar.
¿Cómo podemos regular la temperatura de manera natural?
Revisando que las ventanas estén en perfectas condiciones y bien aisladas, para que no se escape el calor.
Por la noche, bajando las persianas para poder mantener más fácilmente la temperatura.
En los días calurosos, abriendo las ventanas y haciendo uso de los toldos y persianas, para mantener el aire más fresco dentro del hogar.
Más trucos para el día a día
Para maximizar la eficiencia energética, hay que tener en cuenta otros detalles tan importantes como poner la lavadora o el lavavajillas en frío o comprar electrodomésticos con etiqueta energética A.
Asegúrate, por otra parte, que ningún sofá u otro mueble está colocado delante de un radiador, ni cuelgues la ropa encima de éste para secarla. Si es necesario, reorganiza el espacio para conseguir que la calefacción se reparta mejor.
¿Y en la cocina?
Ahora que también preparamos mucha comida en casa, a mí estos tips me ayudan mucho:
Juega con el calor residual del horno, así como el precalentamiento, para que se terminen de hacer los alimentos.
Aprovecha que estás calentando un plato en la bandeja de abajo del horno, para preparar otra receta en la de arriba.
No abras el frigorífico ni el congelador durante mucho rato. Antes de hacerlo, ten claro qué vas a buscar en vez de pensarlo para que no se pierda el frío.
Si almuerzas productos que tenías en el congelador, sácalos antes de ir a dormir y déjalos en la nevera descongelándose.
Tapa las ollas y las paellas para que no se pierda el calor y los alimentos se cocinen más rápido.
Y de vez en cuando... Vuelve a lo analógico. Las maratones de series, clases online y videollamadas con amigos consumen mucha energía, así que intenta hacer actividades en las que no necesites conectar nada: leer, pintar, pasar tiempo con los de casa, practicar deporte…
Espero haberte contagiado el amor por las #buenasenergías en casa y que puedas aplicar alguno de estos trucos para reducir el consumo, ahorrar energía y, sobre todo, poner tu granito de arena en temas de consumo consciente y sostenibilidad. Y es que incluso haciendo todo lo posible, nuestra vida y trabajo gira en torno al consumo de calefacción, luz y dispositivos tecnológicos, de modo que, puestos a gastar, procuremos que sea energía comprometida con el medio ambiente.
Y tú ¿qué trucos para ahorrar utilizas mientras teletrabajas?