Jaime llega tarde a casa, después de un largo día de trabajo y una sesión de gimnasio. Tiene hambre, pero cuando abre la nevera, no encuentra nada que le llame la atención. ¿Solución? Picotear algo mientras se prepara una cena rápida para salir del apuro.Su amigo Luis también ha llegado tarde a casa y ha estado en el gimnasio. De hecho, han ido juntos. La diferencia es que cuando él abre la nevera, puede escoger el tupper que más le apetezca, calentar la comida y disfrutar. Desde que el batch cooking forma parte de su vida, dedica unas horas de los domingos a preparar los platos de la semana y le compensa. ¿Y tú? ¿Planificas las comidas como Luis o te pasa lo mismo que a Jaime? ¿El batch cooking forma parte de tu vida? ¿Por qué tiene tantos seguidores? Si quieres descubrir las claves y los beneficios, quédate con nosotros.
¿En qué consiste el batch cooking?
Seguro que durante el 2021 oíste estas dos palabras inglesas que tan de moda se pusieron. Juntas significan “cocinar por lotes” y en eso consiste esta técnica, en planificar, organizar y preparar los menús de la semana de una vez. Con ella puedes:
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Cocinar menús completos.
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Dejar a punto bases o acompañamientos de platos.
Si pasar dos o tres horas en la cocina durante el fin de semana no te parece un gran plan, piensa en cómo puede ayudarte el batch cooking:
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Si trabajas fuera de casa, es perfecto, porque no tendrás que buscar un menú cada mediodía. De esta manera, al final de la semana habrás ahorrado mucho.
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Si comes en casa, tendrás la base de cada comida cocinada y así ganarás un tiempo extra, algo que siempre viene bien.
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Además, al organizar el menú semanal, puedes incorporar más variedad en cada plato. ¿El resultado? Una dieta equilibrada y llena de nutrientes que te sacará de la rutina.
Tu primer batch cooking empieza así…
No te agobies, porque cocinar así es más fácil y práctico de lo que parece. Además, nosotros te daremos las claves para que tu primer batch cooking sea todo un éxito. Para empezar, resérvate una tarde o una mañana para cocinar. Piensa que es tiempo para ti, para cuidarte como te mereces.
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Lo más importante de este método es el diseño del menú semanal. Este es el punto de partida. Si no sabes qué quieres comer, es imposible organizarse. ¿Cuántos menús vas a preparar? ¿Quieres hacer platos completos o solo las bases? ¿Para cuántas personas vas a cocinar? Puedes hacer batch cooking para una o para toda una familia.
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Para planificar el menú, te aconsejamos hacerlo en un bloc de notas. Así lo verás más claro. También venden planificadores especiales. La idea es que puedas ir acumulando los menús de cada semana y que, en cualquier momento, puedas repasar lo que ya has preparado o evitar repeticiones.
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Cuando ya tengas claro el menú, deberás elaborar la lista de la compra. Un consejo: abre la nevera y comprueba si tienes alimentos que puedes aprovechar.
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Cuando tengas claras las recetas de la semana, apunta los ingredientes necesarios para cada una. De esta forma, verás si se repiten y calcularás mejor la cantidad.
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Por último, utiliza bolsas reutilizables. Son tus mejores aliadas para evitar las de plástico y contribuir al cuidado del medio ambiente.
Un batch cooking siempre debe incluir estos pasos, pero todavía podemos darte más claves. Por cierto, ¿empiezas a tener hambre como nosotros?
¿Cuáles son los mejores alimentos para el batch cooking?
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Para la base de los platos: combina legumbres (como lentejas o garbanzos) y cereales (arroz, quinoa, mijo, trigo sarraceno). Puedes escoger entre una gran variedad y se adaptan a cualquier preparación.
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Las verduras de temporada son imprescindibles. Cocinadas al horno puedes preparar cremas o sopas. También puedes saltearlas y añadirlas a revueltos y tortillas o usarlas como guarnición de otros platos.
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Carne o pescado. Son fundamentales por la proteína. Prepara fondos para platos que podrán acompañarse con arroces o legumbres.
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Salsas o sofritos. Para un batch cooking más sabroso, no te olvides de ellos. Una salsa boloñesa, un pesto… ¿Cuál es tu salsa o sofrito favorito?
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Si incluyes los desayunos, puedes preparar granola, pan o bizcochos caseros.
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¿Y la pasta? Como absorbe mucho líquido, no puede congelarse cocida ni prepararse con antelación. Además, pierde consistencia. La excepción es la pasta al horno, como la lasaña o los canelones. De todas formas, se tarda muy poco en cocer la pasta, por lo que en este caso es mejor hacerlo al momento.
Para aprovechar el tiempo al máximo, empieza cocinando las legumbres y los cereales. Después, los alimentos que van al horno. Acuérdate de poner dos bandejas a la vez para ahorrar energía. Mientras tanto, puedes hacer los sofritos y las salsas, así como las verduras al vapor. Por último, haz todas las preparaciones en frío, como cortar frutas para una macedonia o preparar un porridge de avena.
¿Cómo conservar los alimentos del batch cooking?
Ahora que ya lo tienes todo, llega el momento de proteger los alimentos para que no se estropeen. Siguiendo estos consejos, te durarán más tiempo:
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Utiliza envases preferiblemente herméticos y de cristal, porque no se impregnan de los olores o sabores. Además, son más prácticos porque los puedes poner en el microondas o en el horno (siempre sin la tapa).
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Congela solo los alimentos que aguantan menos tiempo en la nevera.
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Las patatas, la pasta o el arroz nunca deben congelarse.
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Pon etiquetas en cada envase para saber qué contienen. Te ayudará a organizarte mejor entre semana.
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Escribe también la fecha en la que has cocinado cada alimento, así sabrás cuánto lleva congelado.
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¿Sabías que puedes congelar las salsas en cubitos de hielo? Después, solo tendrás que sacarlas un poco antes y calentarlas.
Cada alimento, una vez cocinado, aguanta unos días determinados en la nevera. Esta miniguía te ayudará a gestionar los tiempos:
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Legumbres: 3 a 5 días.
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Carnes y pescados: 3 a 4 días.
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Guisos y sopas: 3 a 4 días.
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Cereales: 3 a 4 días.
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Verduras: 3 a 5 días.
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Huevos cocidos: 6 a 7 días.
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Salsas: 4 días.
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Panes: 7 días.
Pero aún queda un motivo importante y es que, ante la subida de precios de la electricidad, ¿no te gustaría ahorrar luz mientras cocinas?
5 consejos para ahorrar luz con el batch cooking: ¡oído cocina!
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Pon los electrodomésticos a su máxima capacidad. Si quieres ahorrar energía, esta es una buena forma de conseguirlo. Por ejemplo, utiliza tanto la bandeja superior como inferior del horno y cocina varios platos a la vez. Por cierto, si eliges electrodomésticos eficientes, el consumo de luz se reduce en un 40%.
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Usa las tapas cuando cocines. Así evitarás pérdidas de calor y reducirás el tiempo de cocción.
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Escoge el tamaño de fuego correcto. Poner una sartén pequeña en un fuego grande es un error muy común que nos hace derrochar energía.
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Aprovecha el calor residual. Apaga los electrodomésticos o la placa unos minutos antes y termina los platos a fuego bajo. Esos últimos minutos de cocción también te ayudan a ahorrar en la cocina.
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El congelador es imprescindible. Acuérdate de etiquetar los envases donde guardarás los menús para saber qué hay dentro. Es mejor que sean de cristal, porque son más sostenibles.
¿Tienes el recetario de Naturgy?
A todos se nos acaba la inspiración en la cocina, pero en lugar de quedarte esperando, puedes encontrarla en nuestro recetario, que está lleno de ideas para cada momento. Desde picoteos fáciles y saludables hasta platos más completos para llenar de energía todos tus días. Y si no puedes acabar una comida sin postre, también te damos algunas recetas muy sanas.
Pongamos que te gustan las setas y has decidido incluirlas en el batch cooking. Si las cocinas, podrás preparar dos platos muy completos:
Risotto de boletus
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400 g de arroz arborio o bomba
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150 g de setas
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1 l de caldo vegetal
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75 g de mantequilla
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75 g de queso parmesano
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1 cebolla
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50 ml de vino blanco
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Aceite de oliva virgen extra
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Sal y pimienta
¿Cómo se prepara?
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En una cazuela con caldo vegetal, incorpora la cebolla, las setas y el arroz.
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Añade vino y deja evaporar.
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Cuando queden pocos minutos, agrega mantequilla, parmesano, sal y pimienta. Remueve todo hasta conseguir la cremosidad que te gusta.
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400 g de setas
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200 g de seitán.
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1 cebolla.
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650 ml de leche entera
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50 g de harina integral
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40 g de mantequilla
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Queso para gratinar
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10 láminas de lasaña
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Aceite de oliva virgen extra
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Sal y pimienta
¿Cómo se prepara?
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Para la bechamel, echa mantequilla en un cazo, derrite y añade harina sin dejar de remover.
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Agrega leche caliente hasta conseguir espesor.
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Salpimienta la bechamel.
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Cuece las placas de lasaña.
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En una fuente de horno, pon una base de bechamel y encima una placa de lasaña con bechamel y relleno con setas y seitán
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Repite hasta llegar al borde de la fuente
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Añade una capa de queso al gusto y salpimienta.
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Hornea durante 30 minutos y gratina unos 2 minutos aproximadamente
Como ves, gracias al batch cooking has ganado mucho tiempo, porque la base principal de estos platos tan elaborados ya la tienes cocinada.
Otra receta que podrías hacer con setas es una simple pero deliciosa tortilla. La cena perfecta para cuando llegas a casa tarde y lo último que te apetece es cocinar durante horas.
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Solo tienes que mezclar el huevo con las setas.
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Cocinar la tortilla.
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Acompañar con verduras o con un poco de arroz que ya tengas preparado.
Ser un maestro del batch cooking es fácil
Cuando escribes en Instagram #batchcooking te aparecen más de 270.000 resultados. ¡Casi nada! No es casualidad que este método se haya puesto tan de moda. Como has visto, tiene muchas ventajas, pero aquí, de lo que se trata, es de que las pruebes tú.
Encuentra las recetas en @NaturgyClientes y saca tu alma de chef. ¡Seguro que la tienes!
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