¿Sabes qué son los ODS? Descubre en qué consisten esta serie de OBJETIVOS aprobados por la UE, para qué sirven y cómo podemos alcanzarlos.
Eficiencia energética
El cambio climático es uno de los principales retos del planeta e involucra al mundo empresarial. Estamos en un momento en el que el sector privado ya no se valora únicamente por el éxito de sus negocios sino también por su estrategia de sostenibilidad y por cómo sus acciones se alinean con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas.
Además, durante los últimos años se han aplicado políticas a nivel internacional para favorecer la transición energética y reducir las emisiones de efecto invernadero con el objetivo de evitar el aumento de energía de hasta un 60 % en 2050 que la Agencia Internacional de Energía pronostica.
Pero ¿qué pueden hacer las empresas para evitar un consumo excesivo de energía? ¿Solo se puede ahorrar con grandes medidas? ¿Crees que a los trabajadores les preocupa la situación ambiental? A continuación, reflexionaremos juntos sobre este tema y compartiremos algunos consejos para que tu compañía, ya sea una pyme o una gran empresa, sea cada día más eficiente.
Actualmente, nos encontramos en un proceso acelerado de electrificación en el que se están sustituyendo los combustibles fósiles por energías de origen renovable como la solar o la eólica. Asimismo, cada vez son más las empresas que apuestan por fuentes de energía verde para abastecer sus infraestructuras y ofrecer sus servicios, ya que estas les aportan muchos beneficios.
A pesar de que apostar por las energías renovables es esencial para frenar el cambio climático, ahorrar en el consumo energético de tu empresa también tiene muchas ventajas para el planeta y la propia compañía.
Para empezar, ahorrar en el consumo mejora la economía de la empresa, por lo que puede invertirse capital que antes se destinaba al consumo energético a otras partidas. Como consecuencia, la competitividad de la compañía aumenta (una empresa con más recursos ¡es una empresa más competitiva!).
Además, uno de los últimos estudios de la OCU, la Organización de Consumidores y Usuarios de España, señala que el 73 % de la población española tiene en cuenta aspectos éticos y ecológicos en la toma de decisiones sobre su consumo y en la elección de las empresas a las que contratar servicios. Por ello, implementar una política de ahorro energético refleja una imagen positiva de la compañía y hace que los clientes puedan sentirse identificados con los valores y las acciones sostenibles.
Según un estudio presentado por The Climate School y realizado por la agencia británica de investigación y comunicaciones estratégicas Kite Insights, un 97 % de los empleadores considera importante para su "motivación y bienestar" actuar contra el cambio climático a través del trabajo.
El estudio, en el que se ha entrevistado a más de 7.000 trabajadores de 15 grandes empresas de todo el mundo, también concluye que hasta un 14 % de empleados considera cambiar de trabajo si su empresa no hace nada para luchar contra la crisis climática. También destaca que a un 60 % de los trabajadores le gustaría recibir formación en la materia.
Estos datos reflejan que hay predisposición por incluir acciones eficientes y responsables con el planeta en la agenda de una empresa. Y, aunque hay muchas maneras de llevarlo a la práctica, un comienzo fácil para todos es aplicar las siguientes medidas de ahorro energético.
Recuerda que puedes suspender e hibernar el ordenador si no estás trabajando. Y cuando termines de trabajar, apágalo siempre.
Ajusta el brillo de la pantalla del ordenador a un nivel medio o bajo: puedes ahorrar hasta un 40 %.
Utiliza un salvapantallas negro, sin imágenes ni animación, o escoge fondos de pantalla con colores oscuros. Estas opciones requieren un 25 % menos de energía que una pantalla blanca o con colores claros.
Si vas a renovar el equipo informático, los mejores modelos son los que tienen el etiquetado Energy Star, que indica que los ordenadores y monitores consumen entre un 25 y un 60 % menos que otros modelos sin el etiquetado.
Si necesitas ventilar el espacio de trabajo, abre las ventanas durante la noche y las primeras horas de la mañana.
Tal y como recomienda el IDAE, “los edificios públicos y centros de trabajo deben ajustar la calefacción a 19 ºC en invierno y el aire acondicionado a 27 ºC en verano”. Evita temperaturas superiores e inferiores respectivamente para no derrochar energía. Además, recuerda que cada grado suplementario representa un 7 % más de consumo energético.
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Si en la oficina hay un refrigerador para guardar los snacks o túpers, es importante conservarlo en buen estado. Por eso, habrá que descongelarlo de vez en cuando para que no genere escarcha, ya que esta puede aumentar el consumo eléctrico en un 20 %.
Comprueba que no haya goteos ni fugas de grifos o cisternas: pueden provocar una pérdida de 100 litros de agua al mes.
En el baño, colocar grifos monomando es más eficiente que tener dos grifos independientes.
Y tú, ¿crees que en tu lugar de trabajo se aplican estos consejos para el ahorro energético? ¿Qué hacéis vosotros para ser más respetuosos con el planeta?
En Naturgy, llevamos años acompañando a empresas de todo tipo en el cambio hacia unas buenas prácticas energéticas. Además, si tienes una compañía y contactas con nosotros, te asignaremos un gestor personal que te asesorará para encontrar el mejor plan de electricidad de la empresa.
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Porque en el mundo hay muchas empresas con #BuenasEnergías y queremos que la tuya sea una de ellas. ¿Hablamos?