Mejorar la eficiencia energética es uno de los objetivos que la Unión Europea se ha propuesto alcanzar a corto plazo. Por eso, tanto a nivel europeo como estatal se están poniendo en marcha medidas destinadas a mejorar y reducir el consumo energético de los hogares. Si estás pensando en pasarte a la energía solar para ahorrar y aportar tu granito de arena para cuidar el medio ambiente, tienes que estar al tanto de la existencia de una bonificación en el IBI para placas solares.
Si llevas a cabo la instalación de placas solares en tu casa, vas a poder ahorrar en este impuesto. Además, esta bonificación es compatible con otras como la reducción en el IRPF.
El IBI es el Impuesto sobre Bienes Inmuebles. Un tributo de naturaleza municipal que te cobra tu ayuntamiento por el hecho de tener un bien inmueble (no es necesario que sea una casa) en su territorio.
Pagas este impuesto si tienes una vivienda en propiedad, aunque no residas en ella. Pero también si eres el propietario de un local, plazas de garaje, naves industriales, o cualquier otro bien inmueble ubicado en terreno urbano municipal.
El IBI se calcula en base al valor catastral de los inmuebles y, en los últimos años, ha experimentado una tendencia al alza. Por suerte, existen bonificaciones que te ayudan a ahorrar.
Las bonificaciones son un descuento que se aplica de forma directa sobre la base imponible de un impuesto. Las establecen las corporaciones municipales a través de sus ordenanzas fiscales. Por tanto, no en todos los municipios se aplican las mismas. Sin embargo, existen un conjunto de ellas que, por imperativo de la normativa estatal, sí deben aplicarse en todos los ayuntamientos.
En el caso de la bonificación del IBI por placas solares, estamos ante una deducción por autoconsumo energético que tiene carácter potestativo. Dicho de una forma más sencilla, es cada ayuntamiento el que decide si aplica o no una bonificación en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles de sus contribuyentes si estos instalan placas solares en su domicilio.
Al ser una cuestión que regula cada municipio, tanto la cuantía de reducción en el IBI por placas solares como el tiempo durante el que se disfruta de este descuento van a variar.
Por tanto, para saber si puedes disfrutar de esta bonificación y en qué términos, será necesario que consultes las Ordenanzas fiscales de tu ayuntamiento.
En términos estadísticos, las provincias de Ávila, Huesca, Palencia, Segovia, Soria, Teruel, Albacete, Lleida, Barcelona, Salamanca y Zaragoza, así como la ciudad autónoma de Ceuta, son las regiones en las que mayor porcentaje de población puede optar a las bonificaciones.
En Pontevedra, Vizcaya, Guipúzcoa, Zaragoza, Jaén, Islas Baleares, Santa Cruz de Tenerife, Valencia, Albacete, Lérida, Castilla y León, Asturias, Álava, Guadalajara, La Rioja, Navarra, Lleida, Girona, Castellón, Cuenca, Albacete, Jaén, Córdoba, Málaga, Cádiz y Ceuta, el 100% de la población beneficiaria puede acceder a las bonificaciones sin ningún tipo de restricción, o con restricciones accesibles.
Requisitos para acceder a la bonificación del IBI por placas solares
Como hemos señalado, son diferentes en cada municipio. Pero, con carácter general, podemos agruparlos en función de si son más o menos restrictivos.
Limitan el descuento en el IBI por placas solares a quienes cumplen condiciones muy concretas en cuanto a los equipos instalados y la potencia, entre otros factores. Esto dificulta mucho el acceso a la reducción a la mayor parte de la población.
Son aquellos que exigen que la instalación aporte entre un 50% y un 60% del consumo energético de la vivienda. Además, también se tiene en cuenta la potencia mínima instalada, e incluso se puede limitar el importe de la bonificación en función del valor catastral del inmueble.
No son requisitos fáciles de cumplir, pero son más accesibles que los considerados como muy restrictivos. En consecuencia, una mayor parte de los hogares que instalan placas solares pueden tener derecho a la bonificación en el IBI.
Persiguen que todos aquellos que han optado por instalar placas solares en su hogar pueden tener acceso a una bonificación fiscal. Son sencillos de cumplir, por ejemplo, que la instalación sea capaz de suministrar un 40% del consumo energético de la vivienda.
El porcentaje de ahorro obtenido con el sistema de autoconsumo energético, y la cantidad de CO₂ que se deja de emitir a la atmósfera, se han convertido en dos de los parámetros más importantes para determinar si se tiene acceso o no a la bonificación en el IBI, y en qué porcentaje.
De nuevo, vas a tener que consultar las Ordenanzas fiscales de tu municipio para saber a qué porcentaje de bonificación tienes derecho y durante cuántos años te resultará de aplicación. Lo que sí podemos decirte es que, con carácter general, la máxima aplicada es de un 50% de la cuota íntegra del IBI y se puede aplicar durante un período de cinco años.
En el caso de ayuntamientos como los de Sevilla y Ceuta, se ha optado por incentivar todo lo posible la transición al autoconsumo fotovoltaico y, para ello, la deducción se extiende a lo largo de 30 años.
A la hora de pasarte a la energía fotovoltaica, tienes que tomar importantes decisiones como el número de placas que necesitas y la elección de un instalador de confianza. Como expertos en la materia, te recomendamos primar siempre la calidad sobre el precio, y te aseguramos que si lo haces así no te vas a arrepentir.
Esto supone hacer una inversión que puede ser más o menos elevada en función del tipo de instalación de placas que lleves a cabo en tu casa. Y decimos inversión, porque desde el primer mes vas a empezar a recuperar parte del dinero que has gastado.
El plazo de amortización suele extenderse a lo largo de varios años. Pero la existencia de una bonificación en el IBI puede acortar ese plazo de amortización entre tres y cinco años.
Supongamos que haces una instalación por importe de 5.000 euros. Y en tu municipio existe una bonificación por autoconsumo que te permite deducirte del IBI un 30% a lo largo de 10 años. Si el importe medio de tu IBI es de 500 euros, vas a ahorrar 150 euros cada año.
Por tanto, al final te habrás ahorrado 1.500 euros sobre lo que te costó en su momento la instalación. A efectos de tu economía doméstica, es como si esta te hubiera costado 3.500 euros en lugar de los 5.000 que has pagado por ella.
Es importante que tengas en cuenta que el descuento en el impuesto no se te va a aplicar de forma automática por el mero hecho de haber instalado placas fotovoltaicas en tu propiedad. Tienes que presentar la correspondiente solicitud de bonificación del IBI por placas solares.
El plazo para presentar la solicitud y la forma en que debes llevarla a cabo también es diferente en cada municipio. Por eso, lo mejor es que consultes directamente con tu ayuntamiento.
No obstante, aquí tienes un listado de la documentación que suele solicitar la Administración:
Para llevar a cabo la petición de aplicación de la reducción en el IBI de tu propiedad inmobiliaria, tienes que acudir a las dependencias municipales o, en su defecto, hacer la presentación a través de registro administrativo o mediante la plataforma electrónica del ayuntamiento.
La bonificación del IBI por placas solares te permite ahorrar cientos de euros, así que no la dejes pasar. Infórmate bien para saber si estas deducciones se están aplicando en tu municipio. ¿Necesitas asesoramiento con la instalación de tus placas solares? En Naturgy estamos a tu disposición y te ofrecemos las mejores ofertas.
