El autoconsumo energético es una realidad de la que puedes ser consciente con tan solo mirar a tu alrededor. Porque seguro que no tardarás mucho en notar la presencia de paneles solares instalados en los tejados de casas unifamiliares, en las azoteas de bloques de pisos y en todo tipo de edificios públicos.
Cada vez somos más conscientes de lo importante que es cuidar del entorno y, por suerte, el avance de la tecnología nos brinda la oportunidad de convertirnos en generadores de energía eléctrica que vamos a usar para nuestro propio consumo. Por eso, es hora de saber qué es exactamente el autoconsumo energético y qué ventajas nos reporta.
¿Qué es el autoconsumo energético y cómo funciona?
La Ley 24/2013, del Sector Eléctrico, define el autoconsumo eléctrico como "el consumo por parte de uno o varios consumidores de energía eléctrica proveniente de instalaciones de generación próximas a las de consumo y asociadas a los consumidores". Dicho de una manera más sencilla, se trata de un sistema que permite que sean los consumidores los que generen la energía que necesitan para satisfacer las necesidades de su hogar o negocio.
Se accede a él mediante la instalación de equipos de generación de energía renovable, siendo los más habituales los paneles solares fotovoltaicos.
El funcionamiento es muy sencillo:
- Se instala un conjunto de placas solares en el tejado o azotea del edificio.
- Los paneles captan la energía del sol y la transforman en electricidad que llega directamente al inmueble.
- Si el sistema cuenta con baterías (esto es opcional), la energía sobrante se almacena en las mismas y se puede recurrir a ella en aquellos días en los que no hay demasiada intensidad solar y la capacidad generadora de las placas se ve mermada.
- Si no hay baterías y la cantidad de energía generada es superior a la que se ha consumido, se vierte el excedente a la red eléctrica y se obtiene por ello una compensación en forma de descuento en la siguiente factura. En cualquier caso, es necesario que las placas siempre se descarguen, ya que de lo contrario no pueden seguir haciendo su trabajo.
¿Qué es el autoconsumo compartido y cómo se aplica?
El autoconsumo energético del que venimos hablando es individual, pero también es posible que varios consumidores se unan para generar energía, a través de lo que se conoce como el autoconsumo compartido.
En esta modalidad, un bloque de viviendas o las naves que integran un polígono industrial crean una comunidad energética que se beneficia de la energía que genera una única instalación de energía renovable.
Para que este sistema funcione hay que definir un acuerdo de reparto que determine de qué manera se va a distribuir la energía generada entre los miembros de la comunidad, y el mismo se debe comunicar a la empresa distribuidora. Por lo demás, el funcionamiento no difiere mucho del autoconsumo individual.
En cuanto a los requisitos, en estos casos se exige que:
- El 75% de los vecinos de la comunidad estén de acuerdo con la instalación de los paneles solares y el sistema de autoconsumo colectivo.
- Los equipos se tienen que conectar a la red interior de los consumidores que forman parte de la comunidad, o bien conectarse a través de líneas directas.
- Los paneles deben estar situados a menos de 2 kilómetros de distancia del punto de consumo.
- Tanto la instalación fotovoltaica como los beneficiarios deben estar dentro de la misma referencia catastral.
Ya sea una instalación de autoconsumo energético individual o de autoconsumo compartido, es imprescindible que esté registrada en el Registro de Autoconsumo del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Para que esto sea posible hay que acreditar que la instalación cumple con toda la normativa vigente en materia de seguridad y calidad.
Diferencias entre autoconsumo compartido a 500 metros y a 2 km
Este sistema ha sufrido cambios en los últimos años, lo que ha generado algo de confusión con los conceptos de autoconsumo compartido a 2 km y autoconsumo compartido a 500 metros.
La legislación anterior imponía como regla general el autoconsumo compartido a 500 metros, de manera que solo los usuarios que estaban a menos de medio kilómetro del punto de generación de la energía podían hacer uso de la misma. Esta norma generó muchas quejas, porque en la práctica limitaba mucho la creación de comunidades generadoras de energía.
Con la entrada en vigor del Real Decreto-ley 20/2022, de 27 de diciembre, se hizo un ajuste legislativo y se estableció el autoconsumo compartido a 2 km. Ahora, pueden disfrutar del autoconsumo compartido aquellas viviendas o empresas que estén a menos de 2 kilómetros de distancia de la instalación fotovoltaica.
El autoconsumo compartido de 2 km se aplica en aquellos casos en los que la instalación está totalmente ubicada en:
- La cubierta de una o varias edificaciones.
- Suelo industrial.
- Estructuras artificiales cuyo objetivo principal no sea la generación de electricidad.
Beneficios del autoconsumo energético para hogares y empresas
Hay muchas formas de hacer un mejor consumo energético, una de ella es desterrar de una vez por todas los mitos en torno al consumo energético, y otra es entrando de lleno en el autoconsumo, ya sea de forma individual o a través de una comunidad.
Ahorro en la factura de la luz
Ahorrar en energía es uno de los objetivos que comparten particulares y empresas, y el autoconsumo se presenta como una buena forma de conseguirlo. Porque cuando un consumidor genera su propia energía reduce significativamente su dependencia de la red eléctrica y, con ella, el importe de su factura de la luz.
El ahorro que se puede conseguir depende de las pautas de consumo, pero en muchos casos puede estar en torno al 50%.
Compensación por excedentes
Si la instalación genera más electricidad de la que se consume, ese excedente se vuelca a la red eléctrica convencional y se percibe una compensación por ello. No se hace un pago directo por esta energía, pero sí se hace un descuento en la factura eléctrica, lo que implica un ahorro todavía mayor.
Amortización de la inversión
Las placas solares tienen una vida media de entre 20 y 25 años, tiempo más que suficiente para amortizar la inversión y disfrutar del ahorro.
Beneficios concretos para los hogares
Estas ventajas que hemos visto son de carácter generalista, pero en el caso concreto de los consumidores particulares el autoconsumo tiene unos beneficios específicos:
- Reduce la dependencia con respecto a las compañías eléctricas, aunque no es posible desconectarse totalmente de la red eléctrica.
- Facilita la monitorización y gestión del consumo energético, ayudando a implementar mejores prácticas de consumo.
- La presencia de un sistema de autoconsumo energético aumenta el valor de mercado de la vivienda.
Beneficios para las empresas
- El ahorro en costes energéticos puede incrementar la competitividad.
- Hacer autoconsumo energético potencia la imagen de la marca como una entidad comprometida con la sostenibilidad y el medio ambiente.
- Se reducen los riesgos asociados al corte del suministro eléctrico.
A todo esto hay que sumar los beneficios que el autoconsumo compartido a 2 km, y el autoconsumo compartido a 500 metros tiene a nivel ambiental, que no son pocos:
- Contribuye a conservar los recursos disponibles.
- Reduce la emisión de gases de efecto invernadero.
- No produce ruidos, por lo que no hay contaminación acústica.
- Impulsa el desarrollo sostenible.
- No genera residuos contaminantes.
- Reduce la necesidad de hacer importaciones energéticas.
El autoconsumo energético es para consumidores particulares y empresas y, como has comprobado, acceder a él y disfrutar de sus beneficios es muy sencillo. Si quieres aprovechar al máximo la energía solar, en Naturgy estamos aquí para ayudarte a conseguirlo.