Siempre que escuchamos hablar del efecto invernadero es para concienciar sobre sus consecuencias negativas, aunque antes no era con esa connotación. Aunque siempre ha existido para que el planeta sea habitable, en los últimos tiempos ha aumentado exponencialmente por el efecto antropogénico. Hoy es imposible que no nos preocupe, así que aquí te contamos por qué se da, sus consecuencias y las acciones para mitigar sus efectos.
Qué es el efecto invernadero
El efecto invernadero se produce cuando la energía solar recibida por la Tierra, que proviene de la radiación solar natural, no puede volver al espacio. La energía solar atraviesa la atmósfera, rebota sobre la superficie terrestre, y rebota otra vez contra la capa de gases de efecto invernadero en la atmósfera volviendo a incidir sobre la superficie de la Tierra, y así una y otra vez.
Esto provoca más calor retenido en la Tierra, y, obviamente, la temperatura de la superficie aumentará. Este fenómeno ha sido cíclico a lo largo de la historia de la tierra, con periodos de glaciación (bajada) y periodos de óptimo climático (subida de las temperaturas). En el último milenio, tuvimos un óptimo climático durante los siglos XII y XIII, que finalizó de forma abrupta en torno a 1315 para dar lugar a la denominada "Pequeña Edad de Hielo", hasta 1815. En la actualidad, estamos en un interglaciar en el que, sin intervención humana, la tendencia de la temperatura es a aumentar.
Asimismo, los gases de efecto invernadero posibilitan la vida. No en vano, sin ellos, estaríamos en un promedio de -18º C, en vez del 15º C que tenemos habitualmente. Son muy pocas las poblaciones que podrían soportar estas temperaturas extremas, y en unas condiciones extremadamente precarias. Por lo tanto, el problema no es la existencia del efecto invernadero en sí, sino su magnitud y origen.
Esto no significa que no debamos parar los niveles excesivos de calentamiento global y de efecto invernadero, hay que actuar para no llevar al planeta a un punto crítico. Actualmente, hay demasiados GEI en la atmósfera. Determinadas prácticas han influido en la situación actual, y corresponde hacer un cambio.
El impacto humano en el efecto invernadero
El efecto invernadero ha dejado de ser un proceso natural y hoy es principalmente antropogénico. En las últimas décadas, ha sido acentuado por la acción del hombre con la emisión de gases perjudiciales, los principales causantes del incremento de la temperatura de la superficie de la Tierra: dióxido de carbono y metano.
La presencia de estos gases comenzó a aumentar con la Revolución Industrial por el uso de combustibles fósiles, siendo alterado el fenómeno beneficioso del efecto. Esto ha ido provocando modificaciones en el clima y generando cambios en el equilibrio de los ecosistemas.
La cantidad total de CO₂ en la atmósfera contribuye al efecto invernadero. Además, el impacto de la ganadería genera óxido nitroso y metano, 296 y 23 veces más perjudiciales respectivamente que el dióxido de carbono o CO₂. El ozono, por su parte, si se concentra en la parte inferior de la atmósfera actúa también como un potente GEI.
La consecuencia es que en la parte superior de la capa de ozono esta se aligera y no puede filtrar igual la radiación solar adversa. Esto trae distintos problemas.
Consecuencias del calentamiento global
Sabiendo que el efecto invernadero es esencial para el clima terrestre, debemos identificar la contaminación como el problema, ya que trae terribles consecuencias. Estas son algunas de las más importantes:
- Deshielo de los polos. El deshielo de los casquetes polares a causa del aumento de temperatura provoca el aumento del mar, que podría llevar a inundar ciudades y poblaciones costeras. También implicaría unos costes de mantenimiento adicionales en obras públicas.
- Desertización. Otro de los problemas está en el avance de la desertización debido a las temperaturas elevadas, a la escasez de lluvias e, incluso, a la irregularidad de estas. Esto, a largo plazo, afecta al ciclo agrícola y a las cosechas, incluyendo un factor de incertidumbre.
- Cambios en el ciclo de las estaciones. Esto se puede medir en los últimos años, con una tendencia, en los climas templados, al aumento de las temperaturas. Y esto afecta a las migraciones de los animales y a su reproducción, pero, también, al proceso de las plantas. La agricultura, apicultura o ganadería se hacen más difíciles.
- Aumento de la acidez del agua. Pensemos que con el calentamiento se modifica el PH del agua en los océanos, que pasa a ser más bajo, lo que genera más acidez. Y la consecuencia es que la vida marina también se modifica, siendo imposible en algunos casos; por ejemplo, se destruyen los arrecifes de coral.
Por todo ello, se está planteando un escenario de transición energética que evite los peores augurios o minimice los efectos. Por esa razón, se hace urgente tomar medidas.
Tomar acción por el clima
Sí es verdad que estamos ante un escenario complicado, pero esto no significa, en absoluto, que no haya soluciones. La toma de conciencia global es un fenómeno que ya se dio en la década de 2000 y que ha tenido varias variables.
Por ejemplo, podemos hablar de Climate TRACE, una coalición formada por nueve organizaciones sin ánimo de lucro, empresas tecnológicas y Al Gore, exvicepresidente de Estados Unidos. Se pretende seguir cuáles son las emisiones atmosféricas de carbono con IA y otras tecnologías para, así, poder dar soluciones eficientes e inteligentes.
La ONU define el cambio climático como “un cambio de clima atribuido directa o indirectamente a la actividad humana”. Y tomó medidas que se plasmaron en el denominado Protocolo de Kioto de 1995, que buscaba la reducción de las emisiones de dióxido de carbono.
Esto dio lugar a un desarrollo más profundo y en 2015 se definió la Agenda 2030, donde se establecieron los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), con 169 metas relacionadas con cada objetivo. Evidentemente, la reducción del efecto invernadero es uno de los puntos clave que se han tratado. En el ODS 13 se habla claramente de la acción por el clima, pero en los ODS 6, 7, 11, 12, 14 y 15 también se habla tangencialmente.
Otro hito fue el del Acuerdo de París de 2016 para evitar que en el siglo XXI la temperatura aumente más de 2 grados centígrados. Un total de 175 líderes mundiales rubricaron este acuerdo, el más ambicioso hasta la fecha.
Soluciones para el efecto invernadero
- Usar energías renovables siempre que sea posible. Por ejemplo, si no puedes empezar con una instalación de autoconsumo fotovoltaica 100 %, utiliza una que sea mixta. Lo mismo con los vehículos; el coche híbrido es una buena opción. En cualquier caso, para entornos domésticos, la energía solar es una posibilidad.
- Utiliza los transportes públicos, las bicicletas, ve a pie siempre que puedas (es bueno para tu salud) y aprovecha las plataformas de coche compartido. En definitiva, tomar conciencia de cuánta energía se puede desperdiciar y redúcela.
- Fomenta la concienciación medioambiental en tu entorno y, por supuesto, da ejemplo.
- Recicla todo lo que puedas y sé estricto con los distintos contenedores. Así reduciremos el volumen de residuos.
- Apuesta por la economía circular. Compra en el comercio local e intenta que los productos se puedan reutilizar en el entorno. Todo esto contribuye a reducir las emisiones contaminantes.
- Ajusta el consumo de carne a lo que realmente necesitas. En este sentido, ver qué emisiones genera lo que comemos puede ser muy interesante para una alimentación consciente.
- Consume productos ecológicos o de kilómetro cero. Esto, igualmente, reducirá la huella de carbono, con todo lo que conlleva.
- Utiliza electrodomésticos inteligentes y bombillas de bajo consumo para la luz. Optimizar el consumo de energía eléctrica ayuda, y mucho, a contribuir a la sostenibilidad medioambiental. Hoy en día, las nuevas tecnologías son nuestras aliadas.
Pon #BuenasEnergías en tu vida y contribuye a un mundo mejor
La concienciación, pero también la acción individual, serán fundamentales para que el efecto invernadero no se desboque y para reducir el cambio climático. Así que tú también puedes hacer algo, desde el consumo energético, seas autónomo o particular. Tienes varias opciones para hacerlo con nosotros, así que te animamos a que apuestes por las #BuenasEnergías.