“¡Nada de hacer daño a los animales y plantas!”
“¡No agotemos los recursos del planeta!”
“¡La energía hay que pagarla!”
Para este artículo, vamos a ponernos en la piel de una persona que vive en un edificio con Calefacción Centralizada. Aunque personalmente se esfuerza por usar la calefacción de forma eficiente, (cerrando ventanas, encendiéndola solo cuando es necesario...) sabe que muchos de sus vecinos no lo hacen, porque total “todos pagan lo mismo”. Pues bien, ¿y si te dijera que esto se va a terminar?
Es más, lo dice la ley porque el pasado 4 de agosto se aprobó el Real Decreto 736/2020, que obliga a la instalación de un sistema de contabilización individualizada de los costes de calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria.
Estos sistemas llevan funcionando en otros países europeos desde hace más de 80 años. Así que no hemos inventado nada nuevo pero como no la habíamos utilizado, ahora nos obligan por nuestro bien y el del planeta.
¿Sabes de qué se trata?
Para empezar, necesitas conocer el tipo de Instalación Central que hay en tu edificio:
En anillo, se instala un contador de energía para cada casa que mide la cantidad de kW de calor que se consume.
- Este repartidor empieza a medir cuando la diferencia entre la temperatura del radiador es mayor que la de la habitación: más de 4º.
- Es importante que una empresa los instale correctamente, con garantías de buen funcionamiento y que, posteriormente, recoja toda la información de forma inalámbrica y la prepare para realizar el reparto de costes.
Cada repartidor está fabricado, homologado (norma UNE-EN-834) y parametrizado para un determinado radiador (marca y modelo) en una posición concreta. Así que, una mala instalación provocará lecturas erróneas y repartos injustos. En las redes hay mucha información, pero mi consejo es que recurras siempre a un especialista de prestigio. Yo te recomiendo, siendo imparcial, la página del Servicio de Reparto de Costes de Naturgy, y la de la Asociación Española de Repartidores de Costes de Calefacción AERCCA.
Quiero darle importancia a la oportunidad de ahorro que estamos desaprovechando. ¿Y tú?
Instalar únicamente el sistema de medición no ahorra, pero permite discriminar a quién usa más la calefacción y, por lo tanto, repartir los costes totales en función de ese uso. Esto es lo que pasará:
En una Calefacción Central, de 5 vecinos, todos pagarán gastos fijos y variables. Imaginemos:
- 350€/mes de gastos Variables: combustible, averías, fungibles, etc.
¿Qué podemos conseguir con este sistema?
1. Acabar con el derroche de la calefacción
Si no tenemos un sistema de reparto de costes y lo hacemos a partes iguales, aunque el uso de la calefacción sea distinto, al final todos pagaremos lo mismo.
PISO | Uso de Calefacción (no medido) | Pago Total del Piso | Gasto Fijo | Gasto Variable |
Primero | 20% | 100 | 30 | 70 |
Segundo | 10% | 100 | 30 | 70 |
Tercero | 30% | 100 | 30 | 70 |
Cuarto | 34% | 100 | 30 | 70 |
Quinto | 6% | 100 | 30 | 70 |
TOTAL | 100% | 500 | 150 | 350 |
2. Abrir los ojos
- 8€ de Gastos fijos (esto no cambia, pues no depende del consumo).
- Y lo que resulte de multiplicar su porcentaje de uso por el coste total variable, que en nuestro ejemplo son 60€.
PISO | Uso de Calefacción (medido por el nuevo sistema) | Pago Total del Piso | Gasto Fijo | Gasto Variable |
Primero | 20% | 100 | 30 | 70 |
Segundo | 10% | 65 | 30 | 35 |
Tercero | 30% | 135 | 30 | 105 |
Cuarto | 34% | 149 | 30 | 119 |
Quinto | 6% | 51 | 30 | 21 |
TOTAL | 100% | 500 | 150 | 350 |
- El segundo y quinto piso pagarán menos: un -25% y un -49% respectivamente. ¡Estarán muy contentos por haber instalado el sistema!
- El primero pagará lo mismo, pero como esta información es transparente, se dará cuenta de que hay pisos que pagan mucho menos e intentará reducir su uso de calefacción.
- El tercero y cuarto piso pagarán más, un +35% y un +49% respectivamente. Siendo testigos de que los demás pagan menos, intentarán reducir su uso.
3. Y pagar menos, siendo más eficientes
Tras varios meses de funcionamiento y viendo que se pueden tomar medidas para usar menos la calefacción, los consumos globales del edificio se van reduciendo y todos pagarán incluso menos.
No hay fórmulas matemáticas para el comportamiento humano, pero estudios de entidades independientes o gubernamentales (IDAE – Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, un organismo adscrito al Ministerio de Industria, Energía y Turismo) muestran que el ahorro de costes puede superar el 20% y llegar al 40%. No está mal, ¿verdad?
Espero haberlo explicado de forma sencilla y haberte animado a dejar entrar las #buenasenergías en casa. ¡Ya ves que todo son ventajas si quieres ser eficiente!