Ahorrar energía es un objetivo común en todos los hogares. No se trata solo de conseguir reducir la factura eléctrica, también de hacer bajar la huella de carbono doméstica. Para lograrlo, tenemos que ajustar el consumo energético y, para ello, es importante saber cuánto consume una televisión.
Porque, con frecuencia, este dispositivo se pasa encendido horas y horas. Incluso cuando no hay nadie delante de la pantalla. Veamos cómo es el consumo de estos aparatos y qué podemos hacer para ajustarlo.
¿Cuánto consume una televisión encendida varias horas al día?
A pesar de la cantidad de tiempo que todos pasamos consultando las redes sociales y todo tipo de información en Internet, la televisión continúa siendo una parte esencial del ocio y el entretenimiento en los hogares.
Una tele es una puerta hacia el entretenimiento. Ya sea a través de los canales de televisión o de las plataformas de streaming, nos permite disfrutar de contenido que se ajusta a nuestros gustos. Series, películas, documentales, deportes, etc.
También es un canal imprescindible para la información a nivel internacional, nacional, e incluso local. Para la mayoría de las personas, los programas de noticias de la televisión son la principal fuente de información.
Si seleccionamos bien los programas que ven los peques de la casa, la televisión puede ser también una herramienta educativa. Y una forma de conexión entre la familia, si conseguimos encontrar programas que todos podamos disfrutar juntos.
Además de todo lo anterior, la televisión es una vía de escape y de relajación frente a un día estresante. Una forma de desconectar de lo que nos ha ocurrido.
Por todos estos motivos, las televisiones pasan muchas horas encendidas en la gran mayoría de los hogares. Fenómeno que tiene un impacto directo en lo que pagamos en la factura eléctrica.
¿Consumen lo mismo todas las televisiones?
Para saber cuánto consume una televisión, tienes que prestar atención a varios factores. El primero de ellos es la calificación energética que haya recibido el dispositivo.
Si en tu casa hacéis un uso intensivo de la tele, o tenéis varios aparatos, es mejor que escojas modelos con calificación energética A o A+. Aunque en un principio son algo más caros, a la larga acabas ahorrando. Porque su consumo energético es menor que el de modelos con una calificación inferior.
Otro aspecto que influye en el gasto es el tamaño de la tele. Como puedes imaginar, a mayor tamaño, mayor consumo.
¿Cuánto consume una televisión de 32 pulgadas? Puede variar según el modelo y su eficiencia, pero oscila entre 115 y 160 W/h. ¿Y un televisor de 55 pulgadas? Si te gusta disfrutar de tus programas, series y películas favoritas en pantalla grande, ten en cuenta que esto tiene un impacto directo en tu factura eléctrica. Porque una pantalla de 50 a 70 pulgadas tiene un consumo que oscila entre los 270 y los 350 W/h. Por eso, si buscas una TV de bajo consumo, será más recomendable escoger una de tamaño más pequeño.
¿Cuánto gasta una TV encendida todo el día?
Aparatos como la televisión y el ordenador pasan muchas horas encendidos cada día. Ahora que somos más conscientes de lo importante que es ahorrar y consumir energía de una forma más sostenible, nos empieza a preocupar cuánto consume un ordenador y cuánto nos cuesta dejar encendida la tele durante horas y horas.
Vamos a suponer que tienes una televisión de 32 pulgadas que está encendida todo el día. Sabemos que el consumo medio de esta pantalla está en torno a los 150 W/h. Por tanto, si se queda en marcha 24 horas, el gasto energético puede estar en torno a los 3,6 kWh.
Ahora, si queremos calcular cómo se traduce esto en dinero, tenemos que saber a cuánto está el kWh , y esto dependerá del tipo de servicio que tengas contratado.
Supongamos que pagas 0,25 euros por kWh. Así que multiplicamos el consumo de 3,6 por el precio de 0,25 y nos sale por 0,90 euros al día. Multiplicado por los 30 días del mes, significa que tu costumbre de tener la TV encendida tantas horas te cuesta 27 euros al mes. Un total de 324 euros al año.
Y ojo, porque a esto todavía le tienes que sumar el consumo fantasma. Porque una televisión apagada también sigue consumiendo si la dejamos en standby. Es cierto que mucho menos que si está en marcha, pero el consumo del televisor sigue sumando en tu factura eléctrica.
¿Cómo conseguir que la televisión consuma menos?
Aquí tienes algunos trucos fáciles de poner en práctica, que conseguirán que deje de preocuparte cuánto consume una televisión.
Busca otras formas de ocio
No centres todo tu ocio y entretenimiento en la tele. Busca otras alternativas que te permitan disfrutar de tu tiempo libre. Puedes dedicar algo de tiempo a la lectura, o salir a hacer un poco de deporte.
También es interesante que apagues la televisión en momentos en los que no es necesario que esté encendida. Por ejemplo, durante la hora de la comida. Es mejor mantener una charla en familia que estar todos mirando la pantalla y sin relacionaros.
Si eres de los que usan la televisión como ruido de fondo mientras está cocinando, limpiando la casa, etc., cambia este hábito. La radio también cumple la misma función, y su gasto energético es menor.
En caso de que escuches la radio o una plataforma de streaming de música a través de la televisión, apaga la pantalla mientras lo haces si tu modelo tiene la opción "sin imagen". Si tu tele no tiene este ajuste, baja el brillo al máximo si la utilizas solo para reproducir programas de radio o música.
Apaga la televisión por la noche
Cuando te vayas a dormir, asegúrate de que el televisor quede totalmente apagado. No uses el apagado que lo deja en standby, porque ya hemos visto que esto genera con consumo fantasma. Si tu televisión no tiene un botón de apagado total, desconéctala de la red tanto por la noche como si vas a estar un tiempo si usarla. Por ejemplo, cuando te marchas de vacaciones.
En caso de que tengas la costumbre de dejar la televisión encendida para dormirte, prográmala para que se apague a una determinada hora. Esto evitará que esté en marcha durante horas y horas mientras nadie la está viendo.
Ajusta brillo y contraste
¿Sabías que el brillo de la pantalla y el contraste también tienen impacto en lo que consume tu televisión? Piensa en tu móvil, si subes mucho el brillo de la pantalla, la batería se agota antes. Esto ocurre porque hay una mayor demanda de energía. Pues bien, con la televisión ocurre lo mismo.
No se trata de que dejes de ver contenido con la calidad que te gusta, pero sí puedes probar a bajar el brillo y a ajustar el contraste. Puedes alterar estos parámetros desde la sección de ajustes de tu dispositivo.
Otro factor que también incrementa el consumo es el volumen. Cuanto más alto, más gasto. Prueba a bajarlo, tus vecinos te lo agradecerán, y tu bolsillo también.
Desconecta todo lo que esté conectado a la televisión (y no estés usando)
Aquí va un truco para reducir el consumo del televisor que pocos saben: cuántas más cosas tengas conectadas al dispositivo principal, mayor va a ser su gasto energético.
Por eso, prueba a desconectar la videoconsola, los altavoces externos y todo aquello que no estés usando. Vas a rebajar el consumo de electricidad de la televisión de forma inmediata.
Ya sabes cuánto consume una televisión y qué puedes hacer para que su impacto en tu factura eléctrica sea menor. Con unos pequeños cambios de hábitos y unos ajustes en el dispositivo, lo tienes listo. Y si quieres ahorrar todavía más, entonces confía en Naturgy y descubre las ofertas que tenemos preparadas para ti.